La vivienda fue reconocida como un derecho humano inicialmente en la Declaración Universal de Derechos Humanos en 1948 y posteriormente en 1966, por el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. En Bolivia a través de su Constitución Política del Estado (2009) la vivienda y el hábitat son reconocidos como un derecho humano fundamental para los bolivianos.

La vivienda es mucho más que un simple espacio edificado: tiene múltiples significados y enfoques. Es por ello que la vivienda adecuada es un elemento central del desarrollo urbano especialmente ante retos como el cambio climático, la pobreza, la exclusión y la desigualdad; es un instrumento para lograr una urbanización incluyente, planificada y sostenible; la importancia de la concepción de vivienda adecuada se fundamenta en siete elementos: i) seguridad de la tenencia, ii) disponibilidad de servicios materiales, instalaciones e infraestructura, iii) asequibilidad, iv) habitabilidad, v) accesibilidad, vi) ubicación y vii) adecuación cultural. Además, se incluyó como octavo elemento a la gobernanza debido a la importancia de la participación de las y los ciudadanos en la toma decisiones para generar valor público.

Hoy, el municipio de La Paz se encuentra ante el reto de garantizar el ejercicio del derecho humano a la vivienda adecuada, y así mejorar la calidad de vida de todas y todos los paceños. Por tal motivo, el documento “Vivienda adecuada y ODS en el municipio de La Paz” tiene como propósito dimensionar las necesidades actuales y, segundo, profundizar en los retos específicos que deben informar y delimitar las acciones a realizar.

En este sentido el documento está dividido en siete capítulos:

• El primer capítulo presenta el marco referencial donde se incluye el marco conceptual, el marco normativo y como la vivienda contribuye a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) a nivel general, nacional y municipal.
• El segundo capítulo efectúa un diagnóstico sobre la situación de la vivienda adecuada en el municipio de La Paz, tomando a cada uno de sus ocho componentes.

• El tercer capítulo muestra el diagnóstico sobre la vivienda en alquiler y anticrético, así como las necesidades de cambio, remodelación y acceso a una primera vivienda para finalmente determinar el índice de necesidad de vivienda.
• El cuarto capítulo contempla el análisis del Índice Municipal de Calidad de la Vivienda a través de sus diferentes componentes, según macrodistrito, sexo del jefe de hogar, nivel socioeconómico y por tipo de necesidad.
• El quinto capítulo desarrolla una síntesis de algunas de las principales políticas y acciones municipales en torno a la vivienda y establece la relación del Plan Integral “La Paz 2040: La Paz que Queremos” con la vivienda adecuada y los ODS; también se analiza los principales programas y proyectos propuestos por el nivel central de gobierno. Asimismo, se evaluó de manera cualitativa el impacto del Programa Barrios y Comunidades de Verdad.
• El sexto capítulo expone los desafíos y propuestas a nivel municipal y nacional para la vivienda ante y post pandemia, así como su vinculación con los elementos de la vivienda adecuada.
• El séptimo capítulo presenta las conclusiones y recomendaciones del documento.

Finalmente, asegurar la vivienda adecuada conlleva la intervención de muchos actores, entre ellos, instituciones públicas del gobierno central, departamental y municipal; inversionistas, desarrolladores, constructores, proveedores de materiales, asociaciones, entidades financieras, trabajadores; incluso las mismas personas que habitarán la vivienda. Este trabajo conduce a una reflexión sobre el camino a recorrer para asegurar que la vivienda en el municipio de La Paz sea capaz de mejorar el bienestar de las personas y de las familias paceñas.