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CAPÍTULO 7.

SÍNTESIS

Barrio de Verdad “Villa Antofagasta Alto La Portada” – Macrodistrito Max Paredes.

Fotografía de Juan Pablo Revollo.

CAPÍTULO 7.

SÍNTESIS

7.1. CONCLUSIONES

La concepción de vivienda adecuada de la ONU empezó a desarrollarse desde el año 1948 en la Declaración Universal de Derechos Humanos, pasando por las conferencias Hábitat I, Hábitat II y Hábitat III; para que finalmente, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, establezca los parámetros de la vivienda adecuada: seguridad para la tenencia, disponibilidad de servicios materiales, instalaciones e infraestructura; asequibilidad, habitabilidad, accesibilidad, ubicación y adecuación cultural; adicionalmente se incluyó en este libro la gobernanza como octavo elemento de la vivienda adecuada. En Bolivia, de acuerdo con la CPE (2009), la vivienda y el hábitat son reconocidos como derecho humano fundamental para las bolivianas y bolivianos y en la LMAD (2010) se establece las competencias para las políticas de vivienda.

En los ODS de la Agenda 2030 se tiene una fuerte relación con la vivienda ya que en este acuerdo internacional, se reconoce el derecho a una vivienda adecuada, la cual repercute en la estimulación de la economía, la reducción de la pobreza y la inclusión en el proceso de urbanización; es decir que además de influir en aspectos relacionados con el espacio doméstico, sus instalaciones, su entorno inmediato y la forma de habitarlo, también tiene una influencia en otros aspectos del desarrollo como la reducción de las tasas de pobreza y hambre, al acceso a la salud y educación, la eliminación de la brecha de género, el incremento de los niveles de inclusión e igualdad socioeconómica

la creación de ciudades sostenibles, el uso eficiente de los recursos hídricos y terrestres, y la formación de alianzas sostenibles para el desarrollo, entre otras. La vivienda adecuada se sitúa en el centro del desarrollo sostenible. En este sentido, se tiene que, de las 169 metas de los ODS, 67 se relacionan directamente con la vivienda y 38 lo hacen de manera indirecta. En Bolivia, de acuerdo con la CPE (2009), la vivienda y el hábitat son reconocidos como derecho humano fundamental para las bolivianas y bolivianas y en la LMAD (2010) se establece las competencias territoriales para las políticas de vivienda. De esta manera, la vivienda contribuye a 101 metas de los ODS; 65 de manera directa y 36 indirectamente. Respecto a las metas ODS de competencia del nivel central del Estado, la vivienda afecta a 26 ODS, 16 de manera directa y 10 indirectamente. En lo que concierne a los gobiernos locales bolivianos, 111 de las 169 metas de los ODS son relevantes y se enmarcan en sus competencias y atribuciones donde la vivienda influye en 75; 49 en forma directa y 26 de manera indirecta.

La falta de vivienda adecuada es una de las principales privaciones que afecta el desarrollo del ser humano, ya que se generan limitaciones en diferentes aspectos como la seguridad, la falta de acceso a servicios básicos, el acceso a equipamientos y en general todos factores que hacen vulnerable la condición de los hogares. De acuerdo con la encuesta municipal de demanda inmobiliaria 2018, se pudo determinar las principales características de acuerdo con los ocho elementos de la vivienda que hacen vulnerables a las personas que viven en el área urbana del municipio de La Paz y que se encuentran resumidas en la figura N° 7.1:

Figura Nº 7.1.

Municipio de La Paz – Área urbana: Diagnóstico de la vulnerabilidad de la población respecto a los elementos de la vivienda adecuada

Fuente: Elaboración Propia.
DD.RR.: Derechos Reales.
m2: Metro cuadrado.
$US.: Dólares americanos.

Por otro lado, se analizó la necesidad de cambio, remodelación y acceso a una primera vivienda. Los hogares urbanos del municipio de La Paz con la necesidad de cambio de vivienda alcanzaban a 59%, 53,2% llevaba más de cuatro años con esta necesidad y 62,5% afirmó que deseaba tener una vivienda propia como razón de su cambio de vivienda, 45,9% quería su vivienda en el mismo barrio, 41,7% en otro barrio, pero dentro del municipio, 78,7% prefería una casa independiente y 71,4% le era indistinto si la vivienda era nueva o usada.

Por otro lado, 49,1% de los hogares urbanos que contaban con vivienda propia querían remodelar su vivienda como alternativa al cambio de vivienda, siendo la remodelación muy necesaria en 57,6% de las viviendas, donde más de 45% arreglaría su fachada como remodelación común con un gasto de $US5.946,2, y 41% realizarían el tirar-levantar tabiques, paredes como remodelación urgente con un gasto de $US14.162,4.

Finalmente, en el municipio 48,4% de los hogares con personas mayores a 18 años que querían independencia declararon que es muy necesario el acceder a una primera vivienda, 41,6% llevaba menos de dos años con esta necesidad, y 75,7% declaraba como razón principal el independizarse, 46,3% deseaba su vivienda en el mismo barrio, 41,9% en otro barrio pero dentro del municipio, con una expectativa de superficie construida de la vivienda de 154,0 m2; 58,2% buscaban una casa independiente y 71,0% le fue indiferente si la vivienda era nueva o usada.

Para la búsqueda de su primera vivienda, 74,1% quería comprar la vivienda teniendo un estimado de $US84.772,7, 69,2% buscaría financiación por créditos, 51,5% con ahorros propios, 75,7% buscaba a través de internet y 66,1% recién empezaría a buscarla. Sin embargo, el anticrético y alquiler estaba como opción de acceso a una primera vivienda, siendo el pago de $US16.998,2 y $US1.234,0 respectivamente. Además, 57,8% de los hogares consideraba que los precios de las viviendas se incrementaron en los últimos 12 meses mientras que 54,1% consideraba que los precios si están de acuerdo con sus necesidades, y 39,3% creía que el Gobierno Central debe solucionar el tema de acceso a la vivienda.

Además, el Índice Municipal de Necesidad de Vivienda (IMNV) fue calculado para aquellos hogares que requerían un cambio o acceso a una primera vivienda, considerando cuatro factores76. El índice para el cambio de vivienda tomando en cuenta el grado de necesidad fue 30,1%, por el tiempo en situación de necesidad con más de cuatro años fue 27,1%, por el estado de vivienda sea nueva o usada fue 36,4% y por la tenencia de vivienda como propia fue 45,4%. El índice para el acceso a una primera vivienda tomando en cuenta el grado de necesidad fue 9,8%, por el tiempo en situación de necesidad menor a dos años fue 8,4%, por el estado de vivienda sea nueva o usada era 14,3% y por la tenencia de vivienda como propia fue 15,0%.

Asimismo, se calculó del Índice Municipal de Calidad de la Vivienda (IMCV), el cual considera aquellas variables que por el contexto del municipio son relevantes y las resume en 9 componentes77, este índice alcanzó a 0,67, es decir, que los hogares del municipio contaban con una buena calidad de vivienda, por ser una puntuación cercana a 1.

Por otro lado, para garantizar el acceso a la vivienda adecuada, debe existir una alineación de los diferentes planes de desarrollo para la consecución de metas comunes. En este sentido, se organizó cada sub eje del Plan Integral “La Paz 2040: La Paz que Queremos” con los elementos de la vivienda adecuada, y de la misma forma cada elemento de la vivienda adecuada se relacionó con la consecución de los ODS. Asimismo, se evaluó de manera cualitativa el impacto del Programa Barrios y Comunidades de Verdad donde se confirmó los resultados positivos respecto a la inversión en infraestructura, ya que, de acuerdo con las percepciones de los beneficiarios entrevistados, la infraestructura urbana, ha mejorado la calidad de vida de sus habitantes. Además, se mencionan los proyectos y programas que son ejecutados por el nivel central mediante la AEVIVIENDA donde recae la mayor concentración de la operación de vivienda social

Finalmente, el año 2020 será recordado como un punto de inflexión para la humanidad ya que se afronta una crisis sistémica sin precedentes derivada por la pandemia de COVID-19, la cual, ha tenido repercusiones en términos económicos, sociales, culturales y ambientales. Esta ha afectado también negativamente el acceso al empleo, la educación, la salud, donde la vivienda se convierte en un elemento fundamental para afrontarla. Es por eso, que se abordó los principales programas y proyectos desarrollados en el municipio de La Paz para afrontar la pandemia y garantizar la vivienda adecuada. Asimismo, se articuló las diferentes Políticas de Vivienda desarrolladas el año 2020, por el GAMLP y el nivel central de gobierno y se las alineó a los elementos de la vivienda adecuada.

7.2. RECOMENDACIONES

Dentro del contexto histórico por la pandemia COVID–19, la vivienda adecuada se valoriza aún más, ya que cada uno sus elementos aportan a una mejor calidad de vida. Una vivienda adecuada significa una mejor adaptación a la nueva forma de realizar las actividades cotidianas, mejores posibilidades de desenvolverse en un nuevo contexto, y mayor bienestar en los aspectos tangibles y subjetivos para cada uno de los habitantes. A partir del análisis y resultados encontrados en este documento es necesario fortalecer los siguientes aspectos:

  • La planificación y ejecución de las políticas, programas y proyectos sobre la vivienda debe darse de manera coordinada con todos los niveles del Estado, principalmente con el nivel central, debido a que las competencias territoriales limitan el actuar de los gobiernos municipales.
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  • Se debe profundizar la planificación en torno a la vivienda adecuada dentro del municipio de La Paz. La pandemia sirvió para denotar que una vivienda adecuada sirve para preservar el desarrollo humano de las personas y otorga cierto grado de resiliencia.
  • El avance para alcanzar una vivienda adecuada debe trabajarse de forma transversal; cada uno de los ocho elementos de la vivienda adecuada son igual de importantes, y no se pueden priorizar uno sobre otros.
  • En el caso de las desigualdades de género y de nivel socioeconómico, éstas constituyen la brecha transversal más extensa para garantizar la vivienda adecuada, posicionando a las mujeres y a los más pobres en una situación de vulnerabilidad, por lo cual se deben desarrollar programas y proyectos focalizados a estos sectores en cada uno de los elementos de la vivienda adecuada.
  • Las políticas, programas y proyectos propuestos y a desarrollar deben estar mejor articuladas a todos los beneficiarios
  • Se debe contar con información actualizada y que respondan a la información específica de los elementos de la vivienda adecuada para conocer el comportamiento de la demanda inmobiliaria en el municipio de La Paz, y a su vez elaborar políticas que mejoren cuantitativa y cualitativamente las necesidades de vivienda.
  • Se debe generar información que permita realizar evaluaciones cuantitativas de impacto para calibrar con mayor precisión los resultados de las políticas, programas y programas para la vivienda. Las evaluaciones de impacto contribuyen a que los tomadores de decisiones cuenten con elementos de juicio más sólidos a partir de mediciones sobre los impactos de las políticas públicas.

La vivienda adecuada en el municipio de La Paz no puede ser abordada desde una mirada sectorial, sino desde una mirada multidimensional, en donde se consideren cada uno de sus elementos, desde una perspectiva territorial, de género y de inclusión. Bajo este fundamento, es importante que, en el proceso de garantizar el derecho de la vivienda en el municipio de La Paz, la creación conjunta de estrategias debe venir de todos los actores públicos de la mano de la población, la sociedad civil organizada, los sectores productivos y la academia para garantizar que las acciones implementadas se orienten hacia un futuro más próspero, inclusivo y sostenible. Garantizar la viabilidad de una vivienda adecuada en el municipio de La Paz es posible a través de modelos innovadores donde la generación de información a partir de estudios como éste, permitan poner sobre la agenda pública los desafíos que prevalecen y afectan a las familias

Barrio de Verdad “Villa Antofagasta Alto La Portada” – Macrodistrito Max Paredes.

Fotografía de Juan Pablo Revollo.