Vista panorámica del barrio “Chuquiaguillo” – Macrodistrito Periférica.
Fotografía de Archivo Fotográfico del GAMLP.
Finalmente, asegurar la vivienda adecuada conlleva la intervención de muchos actores, entre ellos, instituciones públicas del gobierno central, departamental y municipal; inversionistas, desarrolladores, constructores, proveedores de materiales, asociaciones, entidades financieras, trabajadores; incluso las mismas personas que habitarán la vivienda. Este trabajo conduce a una reflexión sobre el camino a recorrer para asegurar que la vivienda en el municipio de La Paz sea capaz de mejorar el bienestar de las personas y de las familias paceñas.
Para el cálculo del Índice Municipal de Calidad de Vivienda (IMCV), se analizaron aquellos hogares que tuvieron alguna necesidad de cambio y/o alguna necesidad de remodelación de su vivienda, como también de algún miembro del hogar que busca independencia para acceder a su primera vivienda en el área urbana del municipio de La Paz a partir de la información de la encuesta municipal de demanda inmobiliaria realizada el año 2018.
De esta manera se utilizaron 65 variables las cuales fueron estandarizadas
de acuerdo con las condiciones que deben cumplir los datos para el uso de componentes principales.El análisis de componentes principales
busca reducir el conjunto de variables X’s iniciales correlacionadas en otro conjunto de variables no correlacionadas Y’s de menor dimensión, es decir, transformar un conjunto de variables X1, X 2,…, Xp a un nuevo conjunto de variables Y1, Y2,…, Yp.El análisis de componentes principales debe cumplir con las siguientes propiedades:
El procedimiento de análisis de componentes principales da como resultado final el número de componentes que formarán parte del modelo de cálculo del índice municipal de calidad de la vivienda, dado por:
Donde:
IMCVi: Índice Municipal de Calidad de la Vivienda para cada
hogar i.
wj
: Ponderación asociada al componente j.
subij: Valoración que recibe el hogar i de las variables
estandarizadas en el componente j.
Sujetos a la condición que deben cumplir las variables estandarizadas se hallan auto valores y el porcentaje de varianza explicada por cada uno de ellos con las variables que el modelo considera como las más relevantes, conformando así los subíndices
y ponderaciones para la construcción del IMCV.Para una interpretación más sencilla de la composición de cada componente, se obtuvo la matriz de componentes rotados
. Este paso, coadyuva con la agrupación de las variables que conformarán los nuevos componentes, otorgándoles un nombre que resuma la objetividad de cada componente.El IMCV presenta como escala mínima 0 y máxima 1, donde el valor cercano a la unidad significa que los hogares cuentan con una vivienda que reúne ciertas condiciones para ser considerada como adecuada.
Una vez aplicado el método de componentes principales se identificaron las dimensiones conformadas con las variables más relevantes que explican el Índice Municipal de Calidad de
la Vivienda abarcando a nueve componentes y 33 variables
. Asimismo, como se explicó la vivienda adecuada es aquella que cumple con las condiciones de: seguridad de la tenencia; disponibilidad de servicios, materiales, instalaciones e infraestructura; asequibilidad; habitabilidad; accesibilidad; ubicación y adecuación cultural; y dada la importancia de la gobernanza en el contexto social, ésta es incluida como una condición necesaria para la vivienda adecuada en el municipio de La Paz, todos estos elementos están incluidos para el cálculo del IMCV como se detalla en la tabla N° 4.1:Con el análisis de componentes principales, se obtuvieron los auto valores y el porcentaje de varianza explicada para cada componente, con esta información se construyeron los pesos ponderados para cada componente.
Por otro lado, para el cálculo de los subíndices se construyó a partir de los componentes de la tabla N° 4.1, considerando la suma de las variables estandarizadas para el numerador y como denominador al mayor valor que tomaría la suma de variables pertenecientes a cada componente.
Por tanto, el Índice Municipal de Calidad de la Vivienda se obtuvo a partir de la agregación de los nueve componentes con las ponderaciones y subíndices correspondientes:
IMCV=w1sub1+w2sub2+...+w9sub9
Donde:
IMCV: Índice Municipal de Calidad de la Vivienda.
wj: Ponderación asociada al componente j; donde j=1,2,…,C.
subj: Subíndice del componente j; donde j=1,2,…,C.
Se realizó tres pruebas que permitieron verificar que el análisis de componentes principales fue el apropiado para la construcción del IMCV. La prueba de Kaiser-Meyer-Olkin (KMO)
, cuyo resultado obtenido fue de 0,776, valor cercano a la unidad, lo que indicaba una buena relación de las variables entre sí. La prueba de esfericidad de Bartlett , indicaba que no es significativa la hipótesis nula, considerando que las variables están suficientemente correlacionadas entre sí para realizar el análisis factorial con el método de componentes principales.Por último, el índice de Cronbach
calculado con las 33 variables resultantes del análisis de componentes principales, obtuvo un resultado igual 0,73 mostrando consistencia en el IMCV calculado.Con el método de componentes principales se identificaron nueve factores, con los cuáles se construyeron el IMCV para el municipio de La Paz.
En este sentido, la puntuación global del IMCV total fue 0,67, es decir, que los hogares del municipio contaban con una vivienda adecuada buena, por ser una puntuación cercana a 1. Respecto a los macrodistritos, Centro presentó el índice más alto (0,73) mientras que Max Paredes presentó el índice más bajo (0,64).
Por otro lado, los macrodistritos Cotahuma, Max Paredes, Periférica y San Antonio obtuvieron un IMCV menor al municipal.
De manera general, los componentes de disponibilidad de servicios básicos, disponibilidad de servicios y bienes complementarios en el hogar y la calidad del material de construcción, presentaban índices altos e inversamente el componente de gobernanza presentó índices bajos, en los macrodistritos urbanos del municipio de La Paz debido a la escasa participación de la población en alguno de los programas, proyectos u obras municipales en su zona y el poco interés en lo que concierne por conocer más sobre lo que se decide en obras de mejoramiento para el municipio.
Cotahuma, mostraba índices mayores a 0,70 en los componentes de disponibilidad de servicios básicos, calidad del diseño y calidad de los materiales de construcción, es decir, que las viviendas contaban con agua, alcantarillado y agua de forma continua todo el día, presentaban cocina, baño y ducha, y con materiales adecuados en el techo, piso y paredes. Sin embargo, los componentes de gobernanza y accesibilidad física
tenían índices por debajo de 0,50, significaba que no todos los hogares contaban con garaje, automóvil y vías accesibles además de que no participan ni tienen interés en los programas, proyectos y obras municipales.Max Paredes, presentaba hogares satisfechos con su entorno personal con un índice de 0,68, con la ubicación obtuvieron un índice de 0,59. Mientras que los componentes de disponibilidad de bienes y servicios complementarios, satisfacción con la vivienda y accesibilidad física tenían índices por debajo de 0,54. Los índices bajos se debían a que, no todos los hogares contaban con internet, computadora, televisión por cable, al menos un automóvil, garaje, ni se sentían cómodos con el espacio y calidad de su vivienda, pero si tenían vías accesibles como calles y avenidas a sus hogares.
Los hogares del macrodistrito Periférica, estaban satisfechos con su entorno personal con un índice de 0,69, los servicios en su barrio obtuvieron un índice de 0,60. Cabe notar que, los componentes de disponibilidad de bienes y servicios complementarios, satisfacción con la vivienda y accesibilidad física tenían índices por debajo de 0,54, es decir, que no todos los hogares contaban con internet, computadora, televisión por cable, al menos un automóvil, garaje, ni se sentían cómodos con el espacio y calidad de su vivienda, pero si tenían vías accesibles como calles y avenidas a sus hogares.
San Antonio, presentaba un índice alto para los hogares que estaban satisfechos con su entorno personal (0,69), con 0,11 puntos menos estaba la satisfacción de la vivienda, mientras que la accesibilidad física, disponibilidad de bienes y servicios complementarios y ubicación tenían índices por debajo de 0,54. Los índices bajos se debían a que, no todos los hogares contaban con al menos un automóvil, garaje, internet, computadora, televisión por cable, acceso a hospitales y módulos policiales, pero si tenían vías accesibles como calles y avenidas a sus hogares.
Sur, presentaba índices mayores a 0,60 en los componentes de satisfacción con el entorno personal, disponibilidad de bienes y servicios complementarios, satisfacción con la vivienda y accesibilidad física. A diferencia de los otros macrodistritos la mayoría de los hogares, si tenía internet, computadora, televisión por cable, al menos un automóvil, garaje, vías accesibles como calles o avenidas a sus hogares, se sentían satisfechos con la relación con su vida en general, familia, actividad principal, amigos, salud y las oportunidades para divertirse. Sin embargo, la ubicación obtuvo un índice de 0,48, ya que las distancias a recorrer son considerables al momento de acceder a farmacias, postas de salud, hospitales, unidades educativas/universidades, restaurantes, vigilancia policial/ módulo y mercados/supermercados.
Mallasa, mostraba índices altos en los componentes de satisfacción con su entorno personal, disponibilidad de bienes y servicios complementarios, accesibilidad física y satisfacción de la vivienda con 0,79, 0,71 y 0,64 respectivamente. Los hogares de este macrodistrito estaban más que satisfechos con la relación con sus amigos, familia, salud, oportunidades para divertirse, actividad principal, vida en general, con el espacio y calidad de sus viviendas, además contaban con al menos un automóvil, garaje y vía accesible como calles avenidas a sus hogares. Al encontrarse lejos del centro del municipio es necesario que sus habitantes cuenten con transporte privado. Por otro lado, los servicios como farmacia, hospital, postas de salud, restaurantes, unidades educativas/universidades, vigilancia policial/módulo, mercado/supermercado son escasos en número y de difícil accesibilidad.
Los hogares del macrodistrito Centro, presentaban un índice de 0,77 en el componente de ubicación, este puntaje se debe a que el macrodistrito concentra los servicios del municipio. El componente de satisfacción con su entorno personal es 0,72, es decir, que los hogares estaban satisfechos con la relación con la familia, vida en general, amigos, actividad principal, salud además tenían computadoras, internet y televisión por cable. Sin embargo, la satisfacción con la vivienda y la accesibilidad física obtuvieron 0,58 y 0,47 respectivamente.
Los componentes de satisfacción con el entorno personal, ubicación, disponibilidad de bienes y servicios complementarios, disponibilidad de servicios básicos, satisfacción con la vivienda, accesibilidad física, calidad del diseño, gobernanza y calidad de los materiales de construcción, conforman la construcción del Índice Municipal de Calidad de Vivienda.
Con relación a los componentes como se muestra en el gráfico N° 4.3, el índice más bajo se presentó en gobernanza, ya que ocho de cada 10 personas afirmaron haber participado rara vez o nunca en alguno de los programas, proyectos u obras municipales en su zona y cinco de cada 10 personas manifestaron tener poco interés por conocer más sobre lo que se decide en obras de mejoramiento para el municipio, resultando en un índice bajo (0,34) mismo que debe ser trabajado por parte de las autoridades locales y la población para fortalecer las intervenciones estatales mediante las acciones colectivas.
Otro índice bajo, fue el componente de accesibilidad física
, si bien más de 80% de las vías son adecuadas, el porcentaje que cuentan por lo menos con un automóvil y con garaje es menor a 40%, resultando en un índice de 0,49.Los componentes de disponibilidad de bienes y servicios complementarios, satisfacción de la vivienda y ubicación presentaron un índice mayor a 0,54. Por otro lado, los componentes de calidad del diseño, disponibilidad de servicios básicos y calidad de los materiales de construcción presentaron los índices más altos 0,95, 0,96 y 0,99 respectivamente.
De los nueve componentes que conforman el IMCV, seis presentaron índices por debajo de 0,67, por lo que se debe reforzar el trabajo conjunto de la población con autoridades estatales del nivel central, departamental y municipal, con el objetivo de mejorar la calidad de las viviendas.
Al realizar el análisis del IMCV por sexo del jefe de hogar, en el gráfico N° 4.4 se observa que los hogares con jefe de hogar hombre tienen índice mayor al de los hogares con jefe de hogar mujer, siendo esta diferencia de 0,3 puntos.
Respecto al nivel socioeconómico, los hogares con nivel Alto tenían un índice alto mientras que los hogares con nivel Bajo tenían un índice menor, entendiéndose que los hogares con mayor poder adquisitivo estaban satisfechos con su entorno y contaban con todos los servicios requeridos.
La diferencia del IMCV entre los niveles socioeconómicos Alto y Medio fue de 0,10 puntos, entre el nivel Alto y Bajo la diferencia fue 0,17 puntos, mientras que la diferencia entre los niveles Medio y Bajo fue de 0,08 puntos.
Al analizar por componentes las diferencias más significativas a favor de los jefes de hogar hombres, fueron la disponibilidad de bienes y servicios complementarios, satisfacción con la calidad y tamaño de la vivienda y calidad del diseño.
Por otro lado, no existieron diferencias significativas en el IMCV de los jefes de hogar hombres o mujeres, en los componentes de disponibilidad de servicios básicos y gobernanza, alcanzando 0,96 y 0,34 respectivamente.
Así también, al analizar el IMCV de los componentes por nivel socioeconómico, en el gráfico N° 4.6 se observa que los hogares pertenecientes al nivel Alto obtuvieron mayores puntuaciones en todos los componentes. La diferencia más significativa está en la disponibilidad de bienes y servicios complementarios, con 0,32 puntos a favor del nivel Alto respecto del nivel Medio y 0,52 puntos a favor del nivel Alto respecto del nivel Bajo.
En los componentes de satisfacción de la vivienda, y la accesibilidad física, las diferencias a favor del nivel Alto fueron más pequeñas respecto al nivel Medio, y menor a 0,25 puntos respecto al nivel Bajo.
Por otro lado, al comparar los niveles socioeconómicos Alto y Medio en los componentes satisfacción con su entorno personal, ubicación, disponibilidad de servicios básicos, calidad del diseño y gobernanza las diferencias fueron menores a 0,8 puntos.
Por último, en el componente de calidad de los materiales de construcción las diferencias entre los tres niveles socioeconómicos Alto, Medio y Bajo no presentaban diferencias significativas, siendo los índices 0,99, 0,99 y 0,98 respectivamente.
En cuanto al índice clasificado por necesidad, es importante analizar las diferencias que pueden ser encontradas según la necesidad de los hogares, ya sea por cambio o remodelación de vivienda, o acceso a una primera vivienda en relación con los componentes que conformaban el IMCV.
En el gráfico N° 4.7 se muestra que los hogares con algún miembro del hogar que tiene la necesidad de acceder a una primera vivienda obtuvieron un índice de 0,70 siendo este el más alto en comparación con la necesidad de cambio de vivienda o el de remodelación de la vivienda.
Respecto al tipo de necesidad por componente, los servicios básicos, servicios complementarios y material de construcción tuvieron índices mayores a 0,93, mientras que la gobernanza obtuvo índices menores a 0,40. Esto quiere decir, que los hogares que tuvieron la necesidad de cambio o remodelación de vivienda, y acceso a una primera vivienda presentaron las mismas inquietudes en cuanto a la falta de información, participación en programas e interés en mejoras del municipio.
Los hogares con algún miembro con necesidad de acceso a una primera vivienda presentaron un índice de 0,75 en el componente de satisfacción con el entorno personal, seguido de los hogares que requieren una remodelación con un índice de 0,70 y los hogares con necesidad de acceso a una vivienda obtuvieron 0,68.
Los componentes de servicios complementarios, satisfacción con la vivienda, accesibilidad fisica y ubicación, presentaron diferencias significativas en los hogares que tuvieron la necesidad de cambio de vivienda, acceso a una primera vivienda y remodelación.
Es evidente que la necesidad de acceso a una primera vivienda por algún miembro del hogar tuvo las puntuaciones más altas en todos los macrodistritos mientras que aquellos hogares con necesidad de cambio de vivienda mostraban los índices más bajos, entendiéndose que estos hogares no se sienten conformes con su entorno ni con su vivienda, resultando en un IMCV relativamente bajo.
A nivel macrodistrital, los hogares con necesidad de cambio, acceso a una primera vivienda y remodelación del macrodistrito Centro obtuvieron los índices más altos. Por su parte, los hogares con necesidad de cambio de vivienda en Mallasa obtuvieron un índice bajo en comparación con la necesidad de acceso a una primera vivienda y remodelación con índices de 0,72 y 0,70 respectivamente.
Los macrodistritos Cotahuma, Max Paredes y Periférica, presentaban diferencias significativas por tipo de necesidad, donde los hogares con necesidad de acceso a una primera vivienda obtuvieron el índice más alto. Por otro lado, San Antonio no presentaba diferencias significativas respecto a las necesidades de los hogares en cuanto al cambio, acceso a una primera vivienda o remodelación.
Es evidente que la necesidad de acceso a una primera vivienda por algún miembro del hogar tuvo las puntuaciones más altas en todos los macrodistritos mientras que aquellos hogares con necesidad de cambio de vivienda mostraban los índices más bajos, entendiéndose que estos hogares no se sienten conformes con su entorno ni con su vivienda, resultando en un IMCV relativamente bajo.
A nivel macrodistrital, los hogares con necesidad de cambio, acceso a una primera vivienda y remodelación del macrodistrito Centro obtuvieron los índices más altos. Por su parte, los hogares con necesidad de cambio de vivienda en Mallasa obtuvieron un índice bajo en comparación con la necesidad de acceso a una primera vivienda y remodelación con índices de 0,72 y 0,70 respectivamente.
Los macrodistritos Cotahuma, Max Paredes y Periférica, presentaban diferencias significativas por tipo de necesidad, donde los hogares con necesidad de acceso a una primera vivienda obtuvieron el índice más alto. Por otro lado, San Antonio no presentaba diferencias significativas respecto a las necesidades de los hogares en cuanto al cambio, acceso a una primera vivienda o remodelación.
Barrio “Challuma” – Macrodistrito Max Paredes.
Fotografía de Gonzalo Flores Morales