Actualmente, las ciudades se encuentran enfrentando un acelerado proceso de crecimiento urbano, lo cual lleva a reflexionar sobre su capacidad para responder a las necesidades de sus habitantes. En este sentido, las acciones de los gobiernos deben enfocarse en políticas territoriales más equitativas y sostenibles, donde la vivienda se constituye en un elemento de cohesión económica y social.

De esta manera, el derecho a la vivienda debe ser garantizado por el Estado, en todos sus niveles, y debe estar articulada con el tejido urbano, donde se producen la convivencia y las actividades de la población. Para el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz (GAMLP) es importante la identificación de los principales aspectos en la temática de vivienda para

focalizar de manera asertiva las diferentes políticas, programas y proyectos. Es así, que en la gestión 2018 se realizó la encuesta municipal de demanda inmobiliaria cuyo propósito principal fue obtener información sobre las necesidades y demanda de vivienda además de la percepción sobre la calidad del espacio público, la infraestructura y los servicios11. Bajo este contexto, en este apartado se presentan los elementos, dimensiones y variables que fueron considerados para visualizar los aspectos de la vivienda adecuada consideradas en el capítulo anterior. El modelo comprende ocho elementos, 15 subdimensiones y 65 variables (tabla N° 2.1).

Con base a esta información, a continuación se analiza el estado actual de la vivienda adecuada en el municipio de La Paz:

2.1. CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LA VIVIENDA Y LOS HOGARES EN EL MUNICIPIO DE LA PAZ

La vivienda está asociada a las condiciones de vida de los hogares y de la población en general. Por lo que, para analizar la vivienda adecuada en el municipio de La Paz, es necesario primero abordar sus características principales.

Se observa en el gráfico N° 2.1, para el año 2018, 25% de los hogares urbanos estaban conformados por cuatro personas, el segundo grupo más representativo fueron aquellos conformados por tres personas (20,2%), le siguen los hogares con cinco personas (17,4%) y después se encontraban las familias integradas con dos personas (14,3%); estos cuatro grupos abarcaban 76,9% de los hogares que residían en el área urbana en el municipio de La Paz. Sin embargo, la composición de los hogares es heterogénea ya que existían familias hasta con 14 integrantes.

Esta diversidad es evidente donde el promedio de integrantes en los hogares urbanos del municipio de La Paz, para el 2018, fue 3,9 personas. Sin embargo, el rango de este dato para los diferentes macrodistritos iba desde 3,6 personas hasta 4,4 integrantes por hogar (gráfico N° 2.2). Los macrodistritos Centro y Periférica presentaban, en promedio, un menor número de personas por hogar (3,6 y 3,7, respectivamente). Por otro lado, el macrodistrito San Antonio poseía, en promedio, un mayor número de personas por hogar (4,4) seguido por el macrodistrito Cotahuma (cuatro personas por hogar).

Además, para el 2018, los hogares urbanos en el municipio de La Paz residían, en su mayoría, en viviendas tipo casa (75,8%) seguido del departamento (16,0%).

A nivel macrodistrital, los hogares de Mallasa moraban mayormente en viviendas tipo casas (87,4%), seguido de Periférica (80%); por otro lado, el macrodistrito con menor porcentaje de hogares que residían en viviendas tipo casa fue Centro (68,3%). En cuanto a las familias que habitaban una vivienda tipo departamento, el comportamiento es inverso, ya que los hogares de Mallasa y Periférica tuvieron un menor porcentaje de participación (6,3% y 12,0% respectivamente) y el macrodistrito Centro tuvo un mayor porcentaje de familias en viviendas de este tipo (26,9%). Otros tipos de vivienda como conventillo, cuarto/habitación, vivienda precaria y garzonier presentaron una participación mínima.

2.2. COMPONENTES DE LA VIVIENDA ADECUADA EN EL MUNICIPIO DE LA PAZ

El ejercicio pleno del derecho humano de acceso a una vivienda adecuada implica contar con la seguridad de su tenencia, disponibilidad de servicios materiales, instalaciones e infraestructura, asequibilidad, habitabilidad, accesibilidad, ubicación, adecuación cultural y una buena gobernanza para lograr políticas públicas inclusivas y garantizar el acceso de una vivienda que responda a las aspiraciones y expectativas de las familias que residen en el municipio de La Paz.

De esta manera, a continuación, se realiza la descripción de cada uno de los componentes que conforman la vivienda adecuada en el área urbana del municipio de La Paz.

2.2.1. SEGURIDAD DE LA TENENCIA

Dentro de los elementos más relevantes de la vivienda adecuada, se encuentra la seguridad de la tenencia de la vivienda, es decir, que una vivienda no es adecuada si sus ocupantes no cuentan con las condiciones que garanticen la protección jurídica contra el desalojo forzoso, el hostigamiento y otras amenazas. De esta manera, la seguridad de tenencia es reconocida como un componente fundamental del derecho a una vivienda adecuada, en virtud del derecho internacional de los derechos humanos12, es así como cualquier cambio en el entorno urbano como la renovación, cambio de uso de suelos, deslizamientos u otros riesgos afectarán directamente en ésta.

a. Accesibilidad jurídica

• Tenencia de la vivienda

La tenencia de la vivienda adopta varias formas de ocupación como el anticrético, alquiler, propia o heredada entre otras. Para el 2018, en el área urbana del municipio de La Paz, la forma de ocupación con mayor porcentaje fue la vivienda propia comprada con 41,3%, seguida de propia heredada con 21,5%, el alquiler con 19,3%, el anticrético con 8,6%, cedida con 7,7% entre los más relevantes.

El mayor porcentaje de hogares que ocuparon una vivienda propia se encontraba en el macrodistrito Mallasa con 50,5%; la mayor proporción de hogares que residían en una vivienda heredada se concentraron en Cotahuma y Max Paredes con 25% cada uno; en Periférica y Centro, 22,8% y 20,3% de los hogares moraban en alquiler; y en Max Paredes 11,9% ocupaban viviendas cedidas.

En cuanto a la jefatura de los hogares, se observa en el cuadro N° 2.2 que los hogares con jefe de hogar hombre tienen mayor capacidad de adquisición en cuanto a la compra de la vivienda, presentando una diferencia de 6 puntos porcentuales respecto de los hogares con jefe de hogar mujer. La ocupación de vivienda heredada muestra una diferencia de 2,7 puntos porcentuales a favor de los jefes de hogar mujeres, el alquiler presenta una diferencia de 3,5 puntos porcentuales en pro de los jefes de hogar hombres. Además, la ocupación de anticrético, cedida, préstamo, regalo no presenta diferencias significativas.

• Formalización de la propiedad de la vivienda propia

Contar con la documentación necesaria sobre la propiedad de vivienda es importante al momento de formalizarla, es decir, realizar el trámite que corresponda en las entidades estatales para su reconocimiento ante la ley y la población.

De esta manera, en el cuadro N° 2.3, y a partir de la información de la encuesta municipal de demanda inmobiliaria del 2018, se observa que más de 70% de hogares que tenían vivienda propia respondieron que sus residencias contaban con planos aprobados13, minuta14 y catastro15, mientras que un porcentaje mayor aseveraron que poseían folio16 (80%). Además 85% de los encuestados aseveraron que sus viviendas estaban registradas en el municipio de La Paz.

A nivel macrodistrital destaca Centro como el lugar con una mayor formalización donde cuatro de cada cinco encuestados que contaban con una vivienda propia afirmaron tener todos los documentos (planos aprobados, minuta, folio y catastro).

Los hogares con vivienda propia con jefes de hogar hombres presentaron un mayor porcentaje de documentación para la formalización, siendo la brecha más significativa el contar con folio (4,7 puntos porcentuales).

• Tenencia de la vivienda en alquiler

El mercado de alquiler es significativo en el municipio de La Paz: uno de cada cinco hogares alquila su vivienda, por lo que es importante analizar las características que hacen a la seguridad de su tenencia como son el tiempo del contrato. De esta manera, en promedio, el contrato de alquiler fue de 2,1 años. El caso más común fue que el tiempo de contrato de alquiler fue de uno a dos años con 29,7% de los casos, le sigue los contratos de hasta un año con 23,6% de los hogares; entre ambos cubren más de la mitad de los hogares. Los hogares con contrato de alquiler indefinido representaron 22,5%, sin embargo aquí empiezan a aparecer las diferencias entre sexos; los hogares con jefe mujer representaron 4,9 puntos porcentuales más a aquellos con jefe hombre. Además 11,5% de los hogares que vivieron en alquiler no tienen contrato, solo un acuerdo verbal reflejando una mayor inseguridad en la tenencia.

Asimismo, también existió una diferencia entre hombres y mujeres, donde fue superior en los hogares con jefe de hogar hombre por 2,8 puntos porcentuales. Por último, los contratos de dos a cuatro años, de cuatro a seis años y los contratos mayores a seis años, acumularon 12,8% del total de los hogares en alquiler, con un porcentaje mayor para los hogares con jefe de hogar hombre.

Por otro lado, el cuadro Nº 2.5 muestra el tiempo de incremento del monto de alquiler, que en promedio fue de 1,5 años para todos los casos. A la gran mayoría de hogares nunca se le aumentó el monto de alquiler (71,9%), muy por debajo se encuentran los hogares a los cuales se les incrementó el monto de alquiler cada año (9,8%), cada dos años (4,8%), o más de tres años (1,5%); a 0,6% de los hogares se les aumentó el monto de alquiler más de una vez al año.

Se puede evidenciar una diferencia entre los hogares con jefe de hogar hombre respecto a aquellos con jefe de hogar mujer, particularmente en los hogares a los que nunca se incrementó el monto de alquiler, con cinco puntos porcentuales más de participación en los hogares con jefatura femenina.

• Tenencia de la vivienda en anticrético

El anticrético o anticresis es la erogación de un monto de dinero para tener el derecho de habitar un bien inmueble por un tiempo determinado, con el compromiso que éste importe sea devuelto en su totalidad una vez que termine el contrato. De esta manera, la proporción de hogares en el municipio de La Paz que en 2018 residía en una vivienda que no era de su propiedad se situaba en 37,3%, de acuerdo con la encuesta municipal de demanda inmobiliaria, donde 8,6% de los hogares ocupaba una vivienda en anticrético.

Respecto a la formalización de la tenencia del anticrético en Bolivia, el artículo 1435 de Código Civil de Bolivia (2010) establece que “la anticresis no puede convenirse por un plazo superior a cinco años y si se pacta otro mayor, él se reduce a dicho término”. En este sentido, en el cuadro Nº 2.6, se observa que 83,6% de los hogares que residían en anticrético, su contrato tiene una duración entre uno a cinco años, como lo señala la normativa vigente. Por otro lado, 2,9% de los hogares tuvieron un acuerdo por más de cinco años, 5,6% de forma indefinida (sin plazo) y 0,3% de los hogares citados aseveraron no tener contrato o un acuerdo verbal o que ya venció. Además, en promedio, a nivel urbano la duración del contrato de anticrético es 2,4 años. Según sexo del jefe de hogar, los hogares con jefes hombres tienden, en promedio, a residir por un tiempo mayor respecto a los hogares donde la cabeza es una mujer (2,5 años Vs. 2,4 años).

Respecto a si los hogares que tienen contrato de anticrético tuvieron algún problema con la ampliación de este o la devolución del dinero, se encontró que 15,4% presentó algún inconveniente; según sexo del jefe del hogar, las mujeres presentaron mayores dificultades respecto a los hombres (17,3% Vs. 14,6%).

Por otro lado, el artículo 1.430 del Código Civil (2010) vigente menciona que “el contrato de anticresis no se constituye sino por documento público, y surte efecto respecto a terceros, sólo desde el día de su inscripción en el registro”, es decir en Derechos Reales. Al respecto, más de la mitad de los hogares del área urbana del municipio de La Paz que residían bajo la figura del anticrético (53,4%) no registraron su contrato en Derechos Reales. Asimismo, 53,8% de los hogares donde el jefe es hombre presentaron esta situación y 52,3% cuando el jefe del hogar es mujer.

2.2.2. DISPONIBILIDAD DE SERVICIOS MATERIALES, INSTALACIONES E INFRAESTRUCTURA

La disponibilidad de servicios materiales, instalaciones e infraestructura en la vivienda son importantes para el entorno en el que las personas interactúan y se desarrollan. Esta disponibilidad hace referencia al acceso en todas sus dimensiones (cantidad y calidad) de los servicios básicos como el agua, energía eléctrica, saneamiento básico y gas domiciliario, que influyen significativamente en la calidad de vida de las personas, así como servicios complementarios como la conexión a internet en casa, televisión por cable, refrigerador, computador, vehículos de cuatro ruedas, ducha, y celular. En esta sección se presenta información estadística de: la disponibilidad de servicios básicos, la disponibilidad de servicios complementarios y la disponibilidad de calidad de infraestructura de servicios básicos.

a. Acceso a servicios básicos en la vivienda

Se considera que una persona presenta la carencia por acceso a servicios básicos en la vivienda si reside en una vivienda con al menos una de las siguientes características: i) El agua se obtiene de un pozo, río, lago, arroyo, pipa; o bien, el agua entubada la adquieren por acarreo de otra vivienda, o de la llave pública o hidrante; ii) no cuentan con servicio de drenaje o el desagüe tiene conexión a una tubería que va a dar a un río, lago, mar, barranca o grieta; iii) no disponen de energía eléctrica y iv) el combustible que se usa para cocinar o calentar los alimentos es leña o carbón sin chimenea. A continuación, se detallan los principales servicios básicos de las viviendas del área urbana del municipio de La Paz:

• Agua potable y alcantarillado en la vivienda

El agua y el saneamiento son derechos en sí mismos y medios esenciales para la garantía de todos los derechos humanos (Naciones Unidas, 2010), especialmente de la vivienda y la salud. El ODS 6: Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos, en su meta 6.1 se pretende para el 2030, lograr el acceso universal y equitativo al agua potable y en la meta 6.2 se busca lograr que todos tengan acceso equitativo a servicios de saneamiento e higiene adecuados prestando especial atención a las necesidades de las personas en situaciones vulnerables, mujeres y niñas.

En el área urbana del municipio de La Paz, para el 2018, 97,6% de los hogares manifestaron tener acceso a agua potable en sus viviendas. A nivel macrodistrital, Mallasa y Cotahuma presentaban la menor proporción de hogares con acceso al agua potable en sus domicilios (92,8% y 95,8%). Por otro lado, los macrodistritos Centro, Periférica y Max Paredes tuvieron la mayor cobertura de agua potable (98,9%, 98,5% y 98%, respectivamente).

Respecto al acceso a alcantarillado, para el 2018, 97,9% de los hogares tenían en sus viviendas este servicio. Asimismo, el macrodistrito Centro fue donde se presentaba una mayor disponibilidad de alcantarillado (99,6%) y en Mallasa, la menor (89,2%).

• Electricidad y gas domiciliario en la vivienda

Otros servicios empleados por los hogares son los insumos energéticos: energía eléctrica y gas domiciliario. Para el caso de la disponibilidad de electricidad, 99,8% de los hogares urbanos en el municipio de La Paz afirmaron contar con este servicio. Para el año 2018, los macrodistritos Mallasa y Max Paredes tenían una cobertura total y los otros macrodistritos urbanos una disponibilidad mayor a 99%.

Por otro lado, en promedio alrededor de cinco de cada 10 hogares urbanos contaban con gas domiciliario en sus viviendas. Este comportamiento se repite en todos los macrodistritos urbanos a excepción de Mallasa donde 13,5% de los hogares tenían este servicio.

b. Disponibilidad de servicios y bienes complementarios en el hogar

En una vivienda digna contar con servicios y bienes complementarios17 mejora las condiciones físicas y sociales para llevar a cabo las diferentes actividades de los integrantes del hogar. En este sentido, a continuación, se presenta el análisis descriptivo sobre la tenencia de conexión a internet en el hogar, computador, teléfono móvil, televisión por cable, refrigerador, movilidades de cuatro ruedas y ducha. Cabe recalcar, que éstos son una parte de los servicios y bienes complementarios de un hogar, pero por la disponibilidad de información de la encuesta municipal de demanda inmobiliaria 2018 solo se abordará los mencionados anteriormente.

• Conexión a internet y computador en el hogar

Para el 2018, 42,8% de los hogares urbanos del municipio de La Paz, declararon tener conexión a internet en su vivienda. Desagregando esta información según macrodistrito, la menor proporción de hogares con internet en sus viviendas fue Max Paredes (32%); por otro lado, el macrodistrito Centro presentó la mayor cantidad (59,6%).

Además, 59,3% de los hogares afirmaron tener un computador en casa, donde nuevamente Centro fue el lugar con una mayor proporción de estos aparatos (74,3%) respecto a los otros macrodistritos urbanos.

• Teléfono móvil en el hogar

Para el 2018, prácticamente la totalidad de los hogares urbanos en el municipio de La Paz poseían con al menos un teléfono móvil. En promedio, cada hogar contaba con 3,2 teléfonos móviles. Este comportamiento, se repite a nivel macrodistrital.

• Televisión por cable en el hogar

El gráfico Nº 2.10 muestra que en promedio seis de cada 10 hogares urbanos tenían el servicio de televisión por cable.

Desagregando esta información, este comportamiento es similar en todos los macrodistritos, excepto en Centro donde aproximadamente ocho de cada 10 hogares contaban con este servicio dentro de sus viviendas.

• Refrigerador en el hogar

Un refrigerador es uno de los aparatos más importantes en la cocina para conservar los alimentos seguros e inocuos. El gráfico N° 2.11 muestra que, en promedio, 81 de cada 100 hogares tenían este aparato electrónico. Los macrodistritos con una mayor proporción de refrigerador en sus hogares fueron Centro y Sur (92,6% y 90,7%, respectivamente), la menor proporción se encontraba en el macrodistrito Max Paredes (69,6%).

• Vehículos de cuatro ruedas en el hogar

Los vehículos de cuatro ruedas se convierten en un medio para mejor la movilidad de los miembros de un hogar, especialmente de aquellos que residen en lugares alejados a sus actividades principales. El cuadro N° 2.8 muestra la disponibilidad de vehículos de cuatro ruedas en los hogares urbanos paceños, para el 2018, donde 72,2% no poseían este bien, 23,4% tuvo un vehículo, 2,7% contaban con dos automóviles y 0,7% tenían más de dos. Los macrodistritos Sur y Mallasa, presentaron la mayor proporción de hogares con automóviles, donde aproximadamente la mitad tenía este bien.

• Ducha y baño en el hogar

El baño en una vivienda es utilizado para la higiene personal y sirve para satisfacer ciertas necesidades biológicas. En este sentido, a nivel urbano, para el año 2018, 99% de los hogares urbanos del municipio de La Paz contaban con baño y 91,2% con ducha. A nivel macrodistrital, Max Paredes, Cotahuma y Mallasa presentaron las brechas más marcadas, donde casi la totalidad de sus hogares tenían un cuarto de baño, pero menos de 90% contaron con una ducha dentro de sus viviendas.

a. Calidad de la infraestructura de servicios básicos en el hogar

La dotación de infraestructura de servicios básicos es una premisa fundamental para alcanzar un nivel adecuado de bienestar social y económico. Sin embargo, la infraestructura debe ir acompañada de la calidad de su suministro ya que solo así se puede asegurar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua, y el saneamiento para todos, tal como lo señala el ODS 6 donde en la meta 6.3 se propone para el 2030, mejorar la calidad del agua mediante la reducción de la contaminación, la eliminación del vertimiento y la reducción al mínimo de la descarga de materiales y productos químicos peligrosos, la reducción a la mitad del porcentaje de aguas residuales sin tratar y un aumento sustancial del reciclado y la reutilización en condiciones de seguridad a nivel mundial.

Debido a las restricciones de la información recopilada en la encuesta municipal de demanda inmobiliaria 2018, se utilizó como aproximación el suministro continuo de agua en los hogares, para medir la calidad de este servicio. Es de esta manera que, en promedio, para el año 2018, 91,9% de los hogares ubicados en el área urbana del municipio de La Paz, contaban con el servicio continua de agua potable. A nivel macrodistrital, Mallasa presentó las mayores falencias en este aspecto (82,9% de sus hogares tenían acceso a agua potable todo el día).

2.2.3. ASEQUIBILIDAD

En el contexto de la planificación urbana y el desarrollo de la propiedad inmobiliaria, la vivienda es “asequible” si una familia no gasta en ella más del 30% de sus ingresos. Además, en el ODS 11 en su meta 11.1 se establece el acceso de todas las personas a viviendas y servicios básicos adecuados, seguros y asequibles y mejorar los barrios marginales. En este sentido, la asequibilidad es la posibilidad de acceder a la vivienda a un precio tal que no signifique sacrificar el consumo de otros bienes y servicios esenciales. La vivienda se convierte en un bien duradero donde se constituye en el activo más importante de los hogares, Sin embargo, su precio, en muchas ocasiones, es superior a los ingresos de los potenciales demandantes. Por esta razón, en muchos de los casos, obtener un crédito es la forma más viable para la adquisición de una vivienda, empero, éste está condicionado al ingreso familiar.

A continuación, se aborda la asequibilidad para acceder a una vivienda.

a. Asequibilidad económica

• Forma de financiamiento de la vivienda propia

Según la encuesta municipal de demanda inmobiliaria en el municipio de La Paz, para el 2018, la mayoría de los hogares con vivienda propia financiaron su adquisición con ahorros propios (61,7%) y con créditos (39,5%); con una participación mucho menor están las otras formas de financiamiento, como se aprecia en el cuadro N° 2.9.

El análisis territorial muestra que en el macrodistrito San Antonio hubo un mayor porcentaje de hogares que financió la adquisición de su vivienda con ahorros propios (70,1%) respecto a los otros macrodistritos urbanos. Lo contrario sucede con Periférica, donde 48,1% de los hogares costearon sus viviendas con créditos. Por otro lado, los hogares con jefatura masculina adquirieron en mayor proporción sus viviendas con ahorros propios respecto a los hogares dirigidos por mujeres (62,7% Vs. 59,0%, respectivamente), las demás formas de financiamiento no muestran diferencias significativas.

Según la encuesta municipal de demanda inmobiliaria en el municipio de La Paz, para el 2018, los hogares con un nivel socioeconómico Bajo financiaron en mayor proporción su vivienda con ahorros propios respecto a los otros segmentos. Asimismo, fueron los hogares con un nivel socioeconómico Alto los que financiaron en mayor magnitud sus residencias con un crédito hipotecario en relación con los otros niveles (cuadro N° 2.10).

Por otro lado, llama la atención que 0,6% de las viviendas fueron financiadas por un crédito de vivienda social; 1,3% de los hogares con nivel socioeconómico Alto accedieron a este financiamiento y 0,2% de las familias con nivel socioeconómico Bajo costearon sus residencias de esta forma. Esto refleja que el acceso al crédito hipotecario para las familias de menores ingresos en condiciones accesibles sigue siendo una tarea pendiente.

Además, los hogares donde la edad del jefe de hogar estuvo entre 45 a 54 años, son los que costearon en una mayor cantidad sus viviendas con ahorros propios y con créditos.

• Precio promedio de la vivienda propia

El precio de la vivienda depende, en términos generales, de características como la calidad, el tamaño, los servicios de los que dispone, la ubicación, así como las circunstancias del mercado. En la encuesta municipal de demanda inmobiliaria se incluyó la pregunta “¿Cuánto pagó/pagará por esa vivienda?” haciendo referencia a las viviendas propias compradas adquiridas hace menos de diez años para realizar una aproximación del precio de la vivienda.

De esta manera, los encuestados aseveraron que pagaron o pagarán, en promedio, $US126.110 por la adquisición de una vivienda propia en el área urbana del municipio de La Paz.

Los hogares que residían en el macrodistrito Centro declararon pagar un precio promedio más elevado ($US260.676) respecto a los otros macrodistritos urbanos. En segundo lugar, se encontraron las familias del macrodistrito Sur, quienes afirmaron pagar un precio promedio de $US142.102, le siguen Mallasa ($US125.838), Cotahuma ($US125.179), Max Paredes ($US116.272), San Antonio ($US99.906), y finalmente el macrodistrito Periférica ($US98.728). Adicionalmente, los hogares con jefatura masculina pagaron un precio promedio mayor por la adquisición de la vivienda propia respecto a los hogares con jefatura femenina - existe una diferencia de $US13.781 -.

• Precio promedio de la vivienda en alquiler

En lo que concierne al precio de alquiler, se tiene que éste es un factor que afecta la accesibilidad económica en aquellos hogares que no cuentan con una vivienda propia. De esta manera, el precio promedio del alquiler en el área urbana del municipio de La Paz, para el 2018, fue de $US192,4 inferior en $US103,6 respecto al salario mínimo nacional en Bolivia para esa gestión18. Asimismo, el monto del alquiler para los hogares con un nivel socioeconómico Alto fue $US272,7, para el nivel Medio $US170,5 y el Bajo $US182,7. Además, los hogares donde su jefatura tuvo entre 45 a 54 años, pagaron un monto mayor respecto a los otros grupos etarios ($US201,2).

Asimismo, existió una diferencia de aproximadamente $US33,3 entre el monto que pagan los hogares cuando el jefe de hogar es hombre ($US181,0) respecto al monto que pagan los hogares con jefatura femenina ($US214,3).

• Precio promedio de la vivienda en anticrético

Por el otro lado, el precio promedio del anticrético en la gestión 2018 fue de $US15.765,6. El nivel socioeconómico Alto pagó $US22.583, el Medio $US13.113 y el Bajo $US11.110,8. También, los hogares conformados por jefes de hogares con una mayor edad son los que pagaron un monto más alto de anticrético, probablemente por su mayor nivel de ahorro respecto a las familias con integrantes más jóvenes.

Según sexo del jefe de hogar, ésta variable presenta diferencias, donde los hogares con jefes hombres tienden, en promedio, a pagar más por el anticrético ($US16.176,1 Vs. $US14.859,0).

2.2.4. HABITABILIDAD

La habitabilidad es considerada como un atributo de espacios construidos para satisfacer las necesidades de los individuos que la habitan, infraestructura, servicios y equipamiento en lo físico, y privacidad, activación y operatividad en lo psicosocial19.

Una vivienda no es adecuada si no garantiza la seguridad física o espacio suficiente para los moradores, así como la protección contra la humedad, frío, lluvia u otros riesgos para la salud y peligros que puedan presentarse en la estructura de la vivienda.

Dentro de las condiciones necesarias de habitabilidad se desarrollaron los siguientes puntos: calidad de los materiales, calidad del diseño y el déficit habitacional.

a. Calidad de los materiales de la vivienda

La calidad con la que se construyen las viviendas es un factor importante a la hora de proveer una vivienda adecuada ya que deben brindar bienestar. A continuación, se detallan los materiales más utilizados en los techos, pisos y muros de las viviendas del área urbana del municipio de La Paz.

• Materiales del techo de la vivienda

El material del techo que más predominó en las viviendas del área urbana del municipio fue la calamina o plancha con 77,1%, seguido de la losa de hormigón con 20,0% y en un porcentaje reducido estuvo con otro material20 con 4,4%.

Respecto al análisis macrodistrital, las viviendas de San Antonio utilizaron la calamina o plancha en 84,0% de sus edificaciones, en Max Paredes, 24,3% de las viviendas utilizaron losa de hormigón y 12,5% de las residencias en el macrodistrito Sur usaron otro material en sus techos.

• Materiales del piso de la vivienda

El material más utilizado en los pisos de las viviendas ubicadas en el área urbana del municipio de La Paz fue el cemento en 47,9% de las edificaciones, 29,0% tenían machimbre, 11,2% usaron parquet, 6,5% mosaico/baldosa/cerámica, 6,2% tablón de madera y finalmente 4,7% otro material21.

Más de la mitad de las viviendas en los macrodistritos Max Paredes, Mallasa San Antonio y Cotahuma fueron construidas con piso de cemento. Respecto a los pisos de machimbre, la mayor proporción se encontraron en el macrodistrito Centro y Periférica (44,6% y 37,2%, respectivamente). Respecto al parquet, las residencias ubicadas en el macrodistrito Sur tuvieron una mayor representatividad (18,2%) respecto a los otros lugares.

• Materiales de los muros de la vivienda

El material de construcción predominante en los muros de las viviendas del área urbana del municipio de La Paz fue el ladrillo (76,8% de las edificaciones); por otro lado, 28,2% de las residencias se construyeron con muros de adobe/tapial y 0,6% con otro material22.

El material más utilizado en los muros de las viviendas del macrodistrito Mallasa fue el ladrillo (94,6%), en Centro se tenía cerca de 40% con adobe/tapial, y las viviendas que contaban con otro material en las paredes se ubicaron en Mallasa y Sur con 1,8% y 1,6%, respectivamente (Gráfico N° 2.19)

b. Calidad del diseño de la vivienda

Como segunda condición de la habitabilidad, se encuentra la calidad del diseño de la vivienda, donde se analizará las características de la construcción, espacio habitacional y espacios complementarios a la vivienda.

• Forma de construcción de la vivienda

La construcción de viviendas puede ser derivado a un arquitecto/ ingeniero, albañil, empresas constructoras o que el mismo dueño trabaje en la construcción de su vivienda. De esta manera, en el área urbana del municipio de La Paz, 58% de los encuestados manifestaron que sus viviendas fueron construidas por sólo albañiles, 18,7% declaró que fue con la presencia de un arquitecto/ ingeniero, 14,4% por autoconstrucción y un porcentaje mínimo aseveró que fue mediante empresas constructoras (3,3%). Cabe destacar que uno de cada 10 personas no supo responder quién realizó la construcción de su vivienda.

En el macrodistrito Cotahuma, dos de cada 10 viviendas fueron autoconstruidas, en Max Paredes seis de cada 10 viviendas fueron edificadas por sólo albañiles, en Periférica, Sur y Mallasa dos de cada 10 viviendas fueron construidas con la presencia de un arquitecto/ingeniero, y en Centro tres de cada 10 viviendas no se saben quién las construyó.

• Antigüedad de la construcción de la vivienda

Como se observa en el cuadro N° 2.14, seis de cada 10 hogares declararon que sus viviendas fueron construidas hace más de 20 años, uno de cada diez hogares declaró que sus viviendas se construyeron entre cinco y nueve años atrás, información similar para las que se construyeron entre 10 a 19 años atrás, las viviendas que fueron construidas en los últimos cuatro años alcanzaron a 8%.

Por otro lado, las viviendas más antiguas por su tiempo de construcción – más de 30 años – se situaron en el macrodistrito Centro con 58,3%, las residencias que se edificaron hace 20 a 30 años atrás se ubicaron en los macrodistritos Sur y Periférica con 26,5% y 26,3% respectivamente. En Mallasa, 22,7% de las viviendas fueron construidas hace 10 a 19 años y 18,7% hace cinco a nueve años atrás. Cotahuma, Max Paredes y San Antonio presentaron las viviendas con menor tiempo de construcción (7,3%, 7,0% y 4,0% respectivamente).

• Superficie con relación al número de habitantes en la vivienda23

Contar con un espacio cómodo dentro de la vivienda, forma parte del bienestar de sus moradores en el desarrollo de sus actividades cotidianas. La utilidad de los metros cuadrados dependerá de la cantidad de personas que residen en la vivienda donde es considerada óptima si tiene 30 m2 por habitante24. En este sentido, una persona en el área urbana del municipio de La Paz contaba con una superficie de 37,8 m2 en promedio25 dentro de su vivienda.

Los macrodistritos con mayor superficie por persona, se ubicaron en Centro, Mallasa y Sur con 44,6 m2, 41,0 m2 y 40,2 m2 respectivamente, y con la menor superficie por persona estaba Max Paredes con 33,3 m2.

• Superficie construida promedio de la vivienda propia

La superficie construida promedio de la vivienda propia fue 132,5 m2 con 33,7 m2 en promedio por persona, por encima de la superficie de vivienda considerada óptima (30 m2). A nivel macrodistrital, Centro, Mallasa y Sur presentaron las viviendas con una mayor superficie construida por habitante con 40,2 m2, 40,1 m2 y 36,1 m2, respectivamente. Por otro lado, Max Paredes presentó el menor número de metros cuadrados por persona (30,1 m2).

Según nivel socioeconómico las asimetrías son más evidentes donde los niveles bajos presentaron una menor superficie construida (121,9 m2), un mayor número de miembros en el hogar (4,4) y una menor superficie construida por habitante (27,9 m2) respecto a los otros estratos socioeconómicos. Respecto al sexo del jefe de hogar las mujeres tuvieron, en promedio, una mayor superficie por habitante en la vivienda respecto a los hogares dirigidos por hombres (36,1 m2 Vs. 32,8 m2).

• Superficie promedio de la vivienda en alquiler

La superficie promedio construida de las viviendas en alquiler en el municipio de La Paz fue de 75,5 m2 y el precio promedio del alquiler fue de $US192,4. Sin embargo, la relación entre la superficie y el precio indica que el costo de vivir en una vivienda en alquiler fue en promedio de $US2,5 por metro cuadrado al mes; la diferencia entre hogares con jefe de hogar hombre y los dirigidos por una mujer es evidente en esta variable; para el primer grupo el precio de vivir en una vivienda en alquiler fue en promedio de $US2,4 por metro cuadrado al mes, mientras que para el segundo grupo fue de $US2,9 por metro cuadrado al mes.

• Superficie promedio de la vivienda en anticrético

Respecto a las principales características de la vivienda en anticrético en el área urbana del municipio de La Paz se tiene que para el 2018, en promedio, el precio fue de $US15.765,6 con una superficie promedio de 102,2 metros cuadrados. Según sexo del jefe de hogar, estas variables presentan diferencias, donde los hogares con jefes hombres tienden, en promedio, a pagar más por el anticrético, ocupar viviendas más grandes respecto a los hogares donde la cabeza es una mujer.

• Dormitorios en la vivienda

De acuerdo con la información del cuadro N° 2.16, para el 2018, en el área urbana del municipio de La Paz se presentó 2,6 dormitorios en promedio por vivienda.

Es así, que 29,6% de las viviendas ubicadas en macrodistrito Max Paredes contaban con un dormitorio; 33,0% de las viviendas en Periférica tenían dos dormitorios; 34,2% de las viviendas en Centro poseían tres dormitorios; cerca de 20% de las viviendas del macrodistrito Sur presentaban cuatro dormitorios; y en San Antonio y Sur, 10,5% y 10,3% de las viviendas tuvieron cinco o más dormitorios.

• Cuarto para cocinar en la vivienda

Uno de los ambientes importantes en la repartición de la vivienda, es la cocina26 cuya funcionalidad requiere de atención en su limpieza y equipamiento para la adecuada preparación de los alimentos. Por lo que, seis de cada 100 viviendas en el área urbana del municipio no contaban con este cuarto para cocinar, es decir, que estas residencias comparten la función de los ambientes ya sea cocina – dormitorio, cocina – sala multiuso, cocina – dormitorio – sala multiuso.

Por último, en el macrodistrito Cotahuma, 9,5% de sus viviendas no contaban con un cuarto para cocinar, mientras que en los demás macrodistritos este porcentaje se reduce y sus diferencias no son significativas.

• Baños en la vivienda

Cada ambiente en la vivienda tiene su importancia y más aún si mencionamos la existencia de un baño, que sea de uso exclusivo del hogar y no compartido con otros hogares, por razones de higiene y prevención de enfermedades. De esta manera, para el 2018, las viviendas del área urbana del municipio tenían 1,4 baños en promedio, además 72,3% de las residencias contaban con un baño, seguido de 19,7% que tuvieron dos baños, y 7,1% que presentaron tres o más baños. Sin embargo, 1% de las viviendas no contaban con baño.

Finalmente, Mallasa es el macrodistrito con mayor porcentaje de viviendas que no contaban con baño (1,8%), Max Paredes tuvo 81% de viviendas con un baño, Centro tuvo 28,2% de viviendas con dos baños y Sur tuvo 19,4% de viviendas con más de tres baños.

• Horario en que la vivienda recibe sol

Que una vivienda reciba sol se ha convertido en un factor importante ya que incide en su precio, así como en la salud de las personas que la habitan. En este sentido, más de la mitad de los encuestados afirmaron que sus viviendas recibían sol todo el día (52,5%), 26,6% aseveraron que solo por la mañana, 15,5% por la tarde, y cerca de 5% que no tienen sol en todo el día.

Por último, una gran proporción de las personas que residían en los macrodistritos Mallasa y Sur mencionaron contar con sol todo el día dentro de sus viviendas (74,8% y 64,9%, respectivamente), aquellos con sol en la tarde estuvieron ubicados en Periférica (19,8%) y Centro (19,8%), y las viviendas con sol sólo en las mañanas estuvieron en Cotahuma (35,4%).

• Función de la vivienda

Muchas veces, la vivienda no solo cumple su rol habitacional, ya que también puede ser utilizada como un espacio para el comercio o para fines de servicios. Es así, que 92,3% de las viviendas del área urbana del municipio tuvieron solo la función habitacional, 6% presentaron adicionalmente otros usos como para el comercio y 1,7% para servicios.

Los macrodistritos Periférica y San Antonio son los que mayor porcentaje de viviendas con función habitacional presentaron, siendo este más de 93% cada uno. Por otro lado, las viviendas donde adicionalmente cumplieron otras funciones como comercio se encontraban en Max Paredes con 7,9% y servicios en Cotahuma con 2,4%.

• Baulera en la vivienda

Como elementos adicionales a la vivienda, se encuentra la existencia de baulera cuya función radica en el almacenamiento de objetos de poco uso de la familia. En este sentido, en el área urbana del municipio 68,6% de las viviendas no contaban con una baulera, 28,2% tenían una y 3,2% tuvieron más de dos.

Además, el macrodistrito Max Paredes presentó el mayor porcentaje con viviendas que no contaban baulera (75,9%), 36,6% de las viviendas del macrodistrito Sur tenían una baulera y más de 5% de las viviendas de Mallasa y Sur tenían más de dos bauleras.

• Garaje en la vivienda

El garaje es el espacio en la vivienda destinado al estacionamiento de los automóviles.

En este sentido, para el 2018, en el área urbana del municipio de La Paz, 62,9% de las viviendas no contaban con garaje, por lo que una de cada tres viviendas si la tenían.

Además, en el área urbana del municipio se tenían en promedio 1,3 garajes por vivienda. De las residencias que contaban con estacionamiento, 77,9% tenían un garaje, 13,7% dos y 7,2% con tres o más.

A nivel macrodistrital, 89,6% de las viviendas en Periférica tenían un garaje, 20,2% de las residencias en Sur poseían dos y 15,4% de las viviendas en Centro tenían tres o más.

• Patio o jardín en la vivienda

El espacio destinado al patio o jardín en una vivienda presenta ventajas como elementos de sociabilización o recreación, privacidad, iluminación, ventilación natural, entorno arquitectónico tradicional, entre otras bondades27.

De esta manera, 29,8% de las viviendas del área urbana del municipio de La Paz contaban con patio o jardín y 70,2% de las residencias son construcciones rígidas sin espacio para la recreación de las familias.

De las viviendas que, si tuvieron patio o jardín, 95,3% tenían solo un patio, donde el macrodistrito Periférica concentró el mayor porcentaje de viviendas con un patio o jardín (97,2%) y Centro agrupó la mayor cantidad de residencias que contaban con dos o más (7,2%). Además, se tenía en promedio 1,1 de patios o jardines por vivienda.

• Ascensor

La existencia de ascensor en la vivienda es una solución adecuada para aquellas personas que no pueden movilizarse ya sea por la edad o algún tipo de discapacidad física28.

En este sentido, se observa en el gráfico N° 2.29, que en el área urbana del municipio 98,9% de las viviendas no disponían de ascensor, quedando un porcentaje mínimo de las residencias que si tenían un ascensor (1,1%). Este comportamiento es el mismo en los distintos macrodistritos urbanos

• Terraza en la vivienda

La terraza al igual que los patios y jardines brindan un espacio de comodidad para la recreación y actividades al aire libre de sus habitantes. Por consiguiente, tres de cada 10 viviendas del área urbana del municipio tenían terraza. Además, en el macrodistrito Max Paredes, cuatro de cada 10 viviendas contaban con terraza, mientras que en los macrodistritos Sur y Mallasa, dos de cada 10 residencias presentaban terraza.

2.2.5. ACCESIBILIDAD

Como lo señala ONU - HÁBITAT (2010), el diseño y material de la vivienda debe considerar las necesidades específicas de los grupos desfavorecidos y marginados, particularmente de personas con discapacidad donde la accesibilidad es la característica del entorno construido que permite a todas las personas el acceso, utilización y disfrute de manera segura y eficiente. Es por ello por lo que, a continuación, con la información disponible, se describe algunos aspectos que

a. Accesibilidad física

La insuficiente accesibilidad física a la vivienda es una de las principales causas de discriminación, especialmente hacia las personas con discapacidad debido a que las denominadas “barreras arquitectónicas” limitan la movilidad. En cuanto a las viviendas, las principales dificultades provienen del entorno y del interior de estas. Una vivienda accesible garantiza la autonomía, la seguridad, la dignidad, el confort y el ahorro de tiempo, no sólo de las personas que la habitan, sino también de aquellas que la visitan.

Con la información recolectada en la encuesta municipal de demanda inmobiliaria 2018, se señalan algunos de los elementos y aspectos relacionados con la accesibilidad física del entorno de las viviendas como la pendiente y el tipo de vía.

En este sentido, 44,3% de las viviendas en el área urbana de La Paz estuvieron ubicadas en una pendiente de vía plana (menor a 10°), 34,6% en una pendiente inclinada (entre 10° a 15°) y 20,0% en una pendiente muy inclinada (mayor a 15°). Además, las residencias de los hogares con un nivel socioeconómico Alto se encontraron en su mayoría emplazadas en una vía plana (48,1%) respecto a los otros segmentos. Según grupo etario del jefe de hogar, la ubicación de las viviendas tiene el mismo comportamiento.

Respecto al tipo de vía, cumple dos funciones importantes - facilitar el movimiento rápido entre un punto y dar acceso a las viviendas -. De esta manera, 60,5% de las viviendas del área urbana del municipio de La Paz estuvieron sobre una calle, 22,7% sobre una avenida principal, 9,4% sobre una gradería, 2,3% sobre un callejón, 2,1% en un pasaje 1,9% en una senda.

Asimismo, más del 80% de las residencias de los distintos niveles socioeconómicos estuvieron ubicadas en una calle y avenida principal. Las viviendas de los hogares de los segmentos socioeconómicos Bajos son las que estuvieran situadas en una mayor proporción en graderías y sendas respecto a los otros niveles (12,6% y 3,1%, respectivamente).

2.2.6. UBICACIÓN

La ubicación de la vivienda es un elemento fundamental para la vivienda adecuada, ya que este aspecto determina en cierta medida el acceso a servicios básicos e infraestructura pública de calidad, además en el municipio de La Paz existen zonas con riesgo de desastres naturales, por lo que adquiere mayor importancia la ubicación de la vivienda. Es por ello que a continuación, se analizará la ubicación de la infraestructura urbana, el nivel de riesgo geológico, los medios de transporte más utilizados y la percepción de la calidad de la infraestructura y servicios urbanos:

a. Vivienda e infraestructura urbana

La principal herramienta empleada para analizar las zonas con mejor acceso a servicios son los mapas de influencia urbana los cuales utilizan información sobre el acceso a diferentes servicios públicos y privados para clasificarlos según el mayor o menor acceso a estos servicios.

Los mapas de influencia urbana suelen utilizarse para identificar las ciudades más importantes dentro de un área urbano que puede ser de mayor o menor tamaño, sin embargo, la misma lógica puede utilizarse para determinar las zonas y barrios con mayor acceso a servicios dentro de una ciudad o municipio específico. En este sentido, para el mapa de influencia urbana32 del municipio de La Paz se tomó en cuenta seis variables: densidad poblacional, densidad del empleo, cercanía a unidades educativas, cercanía a centros de salud, cercanía a mercados, y cercanía a áreas verdes; para cada zona, se clasificó cada variable en “muy bajo”, “bajo”, “moderado”, “alto” y “muy alto” según su valor, bajo el siguiente detalle:

En este sentido, las variables utilizadas en el mapa de influencia urbana del municipio de La Paz fueron:

• Densidad poblacional: Tiene una ponderación de 20%, es una variable que indica la cantidad de personas que habitan en la zona en relación con el tamaño del territorio; su importancia radica en la posibilidad de generar clusters económicos con mayor facilidad, aspecto que está fuertemente relacionada con la densidad del empleo.

• Densidad del empleo: Es la variable más importante del modelo con una ponderación de 40%, ya que aquellos territorios que tienen una alta densidad del empleo presentan también mayor actividad económica, por lo que la población que habita dichas zonas se beneficia con una mayor oferta de bienes y servicios, facilitando el acceso a infraestructura, equipamiento, y servicios dentro del mismo territorio. Esta variable incluye desde los servicios como salud y educación hasta servicios de ocio y recreativos.

• Cercanía a unidades educativas: Otro tipo de variable son aquellas relacionadas a la infraestructura instalada, como son las unidades educativas con 10% de ponderación. Aquellos territorios mejor ubicados son aquellos que tienen infraestructura educativa, esto facilita el acceso a educación, ya que minimiza los costos de transporte, incluyendo el tiempo de transporte y otros aspectos sociales.

• Cercanía a centros de salud: Otro tipo de infraestructura que se consideró son los centros de salud, con 10% de ponderación, ya que su acceso dentro de la misma zona facilita el servicio de salud de la población.

• Cercanía a mercados: Tiene una ponderación de 10%, donde estos lugares son los principales centros de abasto, lo que significa mayor facilidad para adquirir bienes de primera necesidad.

• Cercanía a áreas verdes: Cuenta con una ponderación de 10%. Esta variable está relacionada con el aspecto ambiental, además de contener elementos de ocio y esparcimiento; las áreas verdes, particularmente las plazas, suelen ser centros urbanos fundamentales en los que se realizan diferentes actividades sociales y económicas, desde reuniones barriales hasta ferias económicas.

Entre las seis variables seleccionadas para realizar el mapa de influencia urbana para el municipio de La Paz, las dos primeras tienen como elemento central el empleo y la actividad económica, a partir de las cuales se desprenden los demás aspectos que generan mayor bienestar en la sociedad, mientras que las siguientes tres variables (cercanía a unidades educativas, cercanía a centros de salud y cercanía a mercados) se las incluye para darle un mayor peso al aspecto social, finalmente la última variable (cercanía a áreas verdes) incluye el valor ambiental y comunitario al modelo.

El mapa N° 4 muestra la habitabilidad en el municipio de La Paz por zonas. La mayor parte del territorio paceño presenta una habitabilidad muy alta y alta; la habitabilidad del macrodistrito Centro es alta y muy alta; los macrodistritos Cotahuma y San Antonio tienen dentro de su territorio zonas de habitabilidad muy alta, alta y moderada; mientras que los macrodistritos Max Paredes y Periférica tienen una habitabilidad muy alta, alta, moderada y baja; por otro lado el macrodistrito Sur tiene una habitabilidad moderada y baja; finalmente el macrodistrito Mallasa muestra una habitabilidad baja y muy baja respecto a los parámetros establecidos.

Los resultados revelan la importancia del aspecto laboral dentro de la habitabilidad en el municipio de La Paz, ya que aquellas zonas que muestran un mayor grado de habitabilidad son aquellas que concentran alta densidad poblacional, lo que conlleva a que muchas actividades económicas se concentren en estos lugares, ejemplos claros de esto son la alta habitabilidad de macrodistrito Centro y de zonas comerciales en los macrodistritos Max Paredes, San Antonio, Periférica y Cotahuma.

b. Ubicación y nivel de riesgo de la vivienda La ubicación de la vivienda según el nivel de riesgo juega un papel relevante en el municipio de La Paz. Desde el 2011, el GAMLP cuenta con el mapa de riegos que es producto de estudios geológicos, hidrológicos, estudio de pendientes, calidad de suelos y otros factores.

De esta manera, a partir de la información de la Memoria explicativa del mapa de riesgos de los distritos urbanos del municipio de La Paz (2011) se tiene que 6% del área de la mancha urbana del municipio de la Paz se encuentra en riesgo muy bajo33; 22% están en riesgo bajo34; 41% en riesgo moderado35; 21% está en riesgo alto36; finalmente, 10% se encuentra en riesgo muy alto37.

Las 36 zonas de riesgo muy alto identificadas son: Márgenes río La Paz, Relleno Sanitario Mallasa, márgenes río Achocalla, Los Lirios Pedregal, Cota Cota calle 25 a calle 28, Cota Cota calle 32 a calle 35, Codavisa, Calle 23 Bella Vista – Ventilla, Las Carmelitas, Alpacoma Llojeta, Calle 20 Bella Vista, 24 de Julio (Següencoma Alto), Santa Fe de Kessini, Final Armanza, Calle 29 Las Lomas – Achumani, Francisco Bedregal I – Cancha Fígaro, Playa Verde – Adela Zamudio, Cotahuma Julio Téllez, Relleno Sanitario Kantutani, 23 de Marzo – Achuma, Juan Sin Miedo – Tejajahuira, Kupini La Plaqueta, San Isidro Alto, Ciudadela Stronguista Norte, Villa Armonía – IV Centenario Germán Jordán, Villa San Antonio, Flor de Irpavi, Santa Bárbara, Octavio Campero, Valle Hermoso – Villa Copacabana, Agua de la Vida, Río Irpavi, margen derecho e izquierdo, Plaza Litoral, Ladera Este - Valle de las Flores, San Simón – san José – Santa Catalina, Limanipata (mapa N° 5).

A pesar de esta situación adversa, el municipio de La Paz cuenta con la resiliencia necesaria para cualquier emergencia. Por un lado, la gestión integral de riesgos forma parte del eje 2 (La Paz protegida, segura y resiliente) del Plan Integral “La Paz 2040”: La Paz que Queremos”. Por otro lado, el uso de suelo está normado por las Leyes Autonómicas 17, 24, 50, 80, y por el Decreto Municipal N° 017/2018, además de estar reglamentado por el Decreto Municipal N° 13 y por el reglamento a la Ley Municipal de Uso de Suelos Urbanos38.

c. Uso y evaluación sobre la calidad de servicios e infraestructuras urbanas

Tanto la frecuencia de uso como la percepción sobre la calidad de las infraestructuras y servicios urbanos son indicadores de la buena ubicación de la vivienda debido al acceso a servicios de calidad. En este sentido, a continuación, se analizarán los servicios del transporte público, salud, espacios de esparcimiento, establecimientos educativos, vigilancia policial/ módulo, servicio de recojo de residuos sólidos/contenedor y las actividades comerciales de venta de alimentos; los servicios que se toman en cuenta son aquellos que se encuentran dentro del mismo barrio de la persona encuestada.

• Uso y evaluación del transporte público

Entre los servicios más importantes a los que debe tener acceso una vivienda está el transporte que cuente con los cinco factores de calidad: dimensión de fiabilidad, dimensión de sensibilidad, dimensión de seguridad, dimensión de empatía y dimensión de elementos tangibles39.

De esta manera, las opciones de transporte dentro del área urbana del municipio de La Paz son: minibús, micro/bus, Taxi de Ruta Fija (TRUFI), taxi, automóvil particular, PumaKatari, teleférico, bicicleta, a pie y otros; sin embargo, los medios de transporte más utilizados son el minibús y el transporte a pie, que entre ambos suman más del 65% de promedio para todos los usos.

Es así, que para el 2018, el medio de transporte más usado fue el minibús donde, en promedio, 39,6% de la población paceña lo utilizó para dirigirse desde su vivienda hacia su destino final. Su principal uso fue para ir a la vivienda del familiar que más frecuenta (58,2%) e ir a un centro comercial/ cine (56,1%). Por el otro lado, el minibús fue menos utilizado para ir al trabajo de su pareja (34%), dirigirse al lugar de estudios de su hijo(a) menor (30,5%), y solo 2% lo utilizó para ir a la parada de transporte público (esta práctica puede ser considerada como trameaje).

Este medio de transporte es el servicio urbano más utilizado, dado que es la alternativa más accesible para movilizarse de un punto a otro. De esta manera, 78,3% de la población lo utilizó todos o casi todos los días y apenas 1% de la población no lo usó.

Entre la población que empleó el minibús, la mayoría lo calificó como bueno y muy bueno (52,7%) y regular (34,5%), la proporción de personas que percibieron a este servicio como malo (9,8%) y muy malo (3%) es mucho menor.

Por otro lado, en promedio, 27,0% de la población fue a pie desde sus viviendas hacia su destino final, siendo el segundo medio de transporte más utilizado. El motivo más relevante para transportarse a pie fue llegar al punto donde se encuentra la parada de transporte público (93,8%).

Sin embargo, el hecho de que la población paceña se dirija a pie a su destino final es un indicador de cercanía, y por lo tanto de accesibilidad a algunos servicios para la población. Es así, que los destinos menos concurridos a pie fueron el trabajo de su pareja (5,6%), centro comercial/cine (6,1%), trabajo (9,4%) y la vivienda del familiar que más frecuenta (14%); mientras que destinos relacionados con servicios fundamentales fueron los más frecuentados a pie, y por lo tanto los más accesibles, lugar de estudio de su hijo(a) menor con 15,8%, centro de salud que utiliza con 33,2% y mercado/ supermercado con 37,8%.

Además, en la última década se implementaron dos medios de transporte con gran relevancia por la calidad de servicio que brindan el bus PumaKatari y el teleférico.

El bus PumaKatari forma parte del Sistema Integrado de Transporte Multimodal implementado por el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz. La proporción del uso del PumaKatari es 0,8%, sin embargo, el servicio que se brinda cuenta con fiabilidad, sensibilidad, seguridad, empatía y elementos tangibles (los cinco elementos de la calidad del transporte urbano). Las personas utilizaron el PumaKatari con mayor frecuencia para ir a la vivienda del familiar (1,4%), ir al centro comercial/cine (1,2%) y dirigirse al trabajo (1,1%).

Además del PumaKatari, el teleférico es otro medio de transporte que cuenta con los cinco elementos de la calidad del transporte urbano; las diferentes líneas del teleférico en el municipio de La Paz forman parte de la Empresa Estatal de Transporte por Cable Mi Teleférico.

Según la encuesta municipal de demanda inmobiliaria 2018, el teleférico tiene en promedio un uso similar al del PumaKatari para los destinos seleccionados (0,8%); los usos más frecuentes del teleférico fueron para ir al centro comercial/cine (1,9%), a la vivienda del familiar que más frecuenta (1,5%) y para ir al trabajo en tercer lugar (0,9%)40.

• Uso y evaluación de los servicios de salud

Los servicios de salud ofrecidos para los barrios son las postas de salud, hospitales y farmacias. En su mayoría éstos fueron utilizados rara vez (54% de las personas, en promedio), 23,7% de la población lo usaron de manera constante y 20,1% no utilizaron este tipo de servicios.

La población que utilizó este tipo de servicios los evaluó mayormente y en promedio de forma buena y muy buena (51,4%) y regular (36,3%) y una pequeña proporción los calificaron como mala (8,4%) y muy mala (3,9%).

• Uso y evaluación de los espacios de esparcimiento

Los espacios de esparcimiento son los sitios para actividades culturales y los espacios deportivos dentro de cada barrio.

En este sentido, en promedio, 36,3% de la población urbana del municipio de La Paz no utilizaron estas infraestructuras y 32,6% los usaron rara vez; 7,6% de las personas los utilizaron de forma mensual, 12,2% al menos una vez por semana y 5,5% todos o casi todos los días.

Además, la población que utilizó estos espacios los calificó como buenos y muy buenos (48,6%) y regulares (40,9%), muy pocos los evaluaron como malos (8,5%) y muy malos (2,1%).

• Uso y evaluación de los establecimientos educativos

Respecto a los establecimientos educativos, la proporción de la población que los usó todos o casi todos los días dentro de su barrio es 18,1%, mientras que 70,2% no frecuentaron en este tipo de infraestructura.

Sin embargo, entre la población que utiliza estas infraestructuras, 63,1% lo calificaron como bueno o muy bueno, 32,3% como regular y 4,6% como malo o muy malo.

• Uso y evaluación de la vigilancia

Por otro lado, respecto a la frecuencia de uso de la vigilancia policial, 26,2% de la población urbana lo hizo todos o casi todos los días, mientras que 70,5% no lo requirió; se debe tomar en cuenta que la utilización de este servicio generalmente responde a situaciones de peligro o delitos, por lo que el grado de uso se puede relacionar con el grado de seguridad del barrio.

Asimismo, 20,7% de las personas que residen el área urbana del municipio de La Paz calificaron la vigilancia policial de su barrio como buena y muy buena, 37,1% como regular, 25,4% como mala y 16,8% como muy mala

• Uso y evaluación del servicio de recojo de residuos sólidos

Por otro lado, 71,7% de la población urbana del municipio de La Paz declaró que utilizó el servicio de recojo de residuos sólidos todos los días o casi todos los días, 21,1% al menos una vez por semana, 1% de manera mensual, 1,7% rara vez y 0,7% no lo usó.

Adicionalmente, 69,1% de las personas que residen en el área urbana del municipio de La Paz percibieron a este servicio como bueno y muy bueno, 23,3% como regular y 7,5% lo calificó como malo y muy malo.

• Uso y evaluación de otros servicios

Respecto a otros servicios como supermercados/mercados, tiendas y restaurantes donde la población puede acudir para abastecerse de alimentos o consumirlos directamente, se puede apreciar en el gráfico N° 2.49 su frecuencia de uso. En este sentido, los mercados/ supermercados y tiendas fueron frecuentados más de una vez a la semana (todos o casi todos los días y al menos una vez por semana) por la mayoría de la población (78,6% y 91,3%, respectivamente). Por otro lado, los restaurantes fueron visitados por 29,5% de las personas al menos una vez a la semana, 41,3% lo hicieron rara vez y 16,1% no lo utilizaron.

No obstante, la calificación de estos tres servicios es similar, en promedio 61,3% de la población los calificaron como buena y muy buena, 33,6% como regular y 5,1% como mala y muy mala.

En su mayoría, la infraestructura y los servicios urbanos reciben una buena calificación por parte de la población, el servicio con mejor calificación es el recojo de residuos sólidos, el cual es además muy utilizado por la población del municipio de La Paz, convirtiéndolo en un servicio urbano de calidad; al igual que las actividades comerciales de venta de alimentos y el transporte público. Por otro lado, el servicio urbano con la peor calificación es la vigilancia policial, el cuál a pesar de ser poco utilizado, tiene un alto grado de desaprobación.

En los anexos se muestran el detalle de la frecuencia de uso y la calificación de cada servicio urbano por macrodistrito y sexo.

2.2.7. ADECUACIÓN CULTURAL

Las características de la vivienda deben responder a la identidad y diversidad cultural de las personas que la habitan, tomando en cuenta su entorno y desarrollo tecnológico y que responda a sus expectativas41. Como parte de la vivienda adecuada, se encuentra el respeto a la expresión de la identidad cultural.

En este sentido, se considera para la adecuación cultural la satisfacción con diversos factores como el tamaño, calidad y ubicación de estas. También se toma en cuenta, la satisfacción que afecta el ritmo de vida de la población, como la disponibilidad de tiempo libre, situación económica, salud física y emocional, entre otras. En este apartado, y de acuerdo con la información disponible, se analizará aspectos relacionados con la satisfacción con la vivienda y con la vida de las personas que residen en el área urbana del municipio de La Paz.

a. Satisfacción con la vivienda

La encuesta de demanda inmobiliaria 2018, refleja la evaluación positiva de la satisfacción con la vivienda respecto a tres componentes relevantes el tamaño, calidad y ubicación de la vivienda.

De esta manera, en el área urbana del municipio de La Paz, 55,6% de los hogares evaluaron como positiva la satisfacción con el tamaño de su vivienda, 56,1% estuvieron conformes con la calidad mientras que, 78,5% de hogares calificaron como positiva la ubicación de sus viviendas.

El macrodistrito Mallasa presentó el mayor el porcentaje de evaluación positiva referida al tamaño de la vivienda (70,9%), el macrodistrito Sur tuvo el mayor porcentaje en cuanto a la evaluación positiva de calidad de la vivienda (64,7%), y Centro tuvo el porcentaje más alto en evaluación positiva de la ubicación de sus viviendas (91,9%).

Respecto a la evaluación por sexo, los hogares con jefatura masculina tuvieron una mayor satisfacción positiva con relación al tamaño, calidad y ubicación de sus viviendas respecto a los hogares dirigidos por mujeres. Las mayores brechas de calificación fueron en la calidad y tamaño de la vivienda con 7,8 y 7,7 puntos porcentuales respectivamente.

b. Satisfacción con su entorno personal

El enfrentar las actividades cotidianas y hacer que las mismas no sean una carga, resulta una tarea compleja para las personas que no cuentan con tiempo disponible, desatando un sinfín de insatisfacciones con su entorno y quizás perdiendo su propia identidad cultural.

En el gráfico N° 2.51, se observa que los hombres presentan un mayor porcentaje de satisfacción positiva con la disponibilidad de tiempo libre, situación económica, privacidad que tiene su hogar, salud física y emocional, oportunidades para divertirse, vida familiar, actividad principal, amigos y con su vida en general, respecto de las mujeres. Sin embargo, la situación económica presenta una evaluación positiva menor a 40%, es decir, que tres de cada cinco hombres y dos de cada tres mujeres están inconformes con su economía y está a su vez repercute en su vida familiar.

Las brechas más relevantes por sexo a favor de los hombres se dieron en las oportunidades para divertirse, salud física y emocional, privacidad de su hogar, y disponibilidad de tiempo libre, lo que implicó que las mujeres no disponían de la libertad de goce en cuanto a diferentes actividades ya sean recreativas o de aprendizaje, manejar sus emociones en la privacidad de sus hogares, afectando así su relación con el entorno que la rodea -familia y amigos – y su identidad cultural.

Por otro lado, la satisfacción de la vida familiar y con su vida en general, obtuvieron más de 83% de evaluación positiva, considerándose de esta manera que prima la familia antes que lo económico y otros aspectos.

Los macrodistritos Mallasa, Sur y Centro contaron con el mayor porcentaje de evaluación positiva en cuanto a disponibilidad de tiempo, situación económica, privacidad que tuvo su hogar, salud física y emocional, oportunidades para divertirse, vida familiar entre otros, lo que indicaría que su población tuvo todas las comodidades de desenvolvimiento en su entorno y no tuvo dificultades de identidad cultural.

2.2.8. GOBERNANZA

Se reconoce que la gobernanza está vinculada al ejercicio de poder y relacionada a los procesos de toma de decisiones involucrando distintos actores tanto estatales como privados en la provisión de bienes y servicios públicos. Desde la perspectiva policéntrica el concepto de gobernanza es multidisciplinario, ya que se refiere básicamente a un proceso que contempla al Estado, a la sociedad civil y al sector privado; cada uno con sus roles definidos.

Para los teóricos del capital social, una sociedad civil fuerte es una garantía de buena gobernanza por las relaciones de confianza, reciprocidad y cooperación entre sus miembros lo que facilita el éxito de las intervenciones estatales, de acuerdo con Putnam, Leonardo y Nanetti (1993), o Crenson (1978). En este sentido, para avanzar en la construcción de una buena gobernanza en necesaria la identificación, decisión y realización de acciones colectivas, para fortalecer las intervenciones estatales. A continuación, y de acuerdo con la información

disponible en la encuesta municipal de demanda inmobiliaria 2018, se abordará algunos aspectos que coadyuvan a la participación ciudadana y por tanto a la gobernanza como la percepción si se recibe suficiente información sobre programas municipales, la participación en programas, proyectos u obras municipales y el interés por saber más sobre lo que se decide en obras de mejoramiento para el municipio.

a. Recepción de información sobre programas municipales

La información proporcionada por el GAMLP a la ciudadanía sobre los programas, proyectos y obras municipales representa un instrumento que permite captar de mejor manera las demandas sociales y ofertas de políticas públicas.

En este sentido, existen diversos medios de comunicación (televisión, radio, redes sociales, medios impresos) por los cuales el GAMLP difunde información sobre sus principales actividades. Sin embargo, para el 2018, 70,4% de la población urbana paceña percibió que rara vez o nunca obtiene información sobre los proyectos, programas, obras que efectúa la autoridad municipal, 15% afirmó que algunas veces y 4,2% aseveró que siempre. La población del macrodistrito Centro, es la que en mayor manera distinguió que siempre o algunas veces se les provee información (26,1%) respecto a los otros macrodistritos urbanos y las personas que residieron en Mallasa fueron las que menos observaron este aspecto (9%). Según sexo, la información sobre las acciones municipales fue transmitida de una mejor manera a los hombres respecto a las mujeres (4,5% de los encuestados hombres afirmaron recibir siempre información sobre las acciones del GAMLP respecto a 3,7% de las mujeres).

En lo que concierne al interés de la población por conocer más sobre lo que se decide en obras de mejoramiento para el municipio se tiene que 42,6% de las personas que residían en el área urbana siempre deseaban saber más, 26,5% alguna vez y rara vez o nunca, cada uno respectivamente. A nivel macrodistrital, en Mallasa (66,7%) y Max Paredes (52,8%) más del 50% de su población tuvieron interés en conocer siempre las obras que se deciden en el municipio.

Asimismo, son los hombres quienes mayor interés presentaron en saber sobre las obras que se ejecutan respecto a las mujeres (45,6% Vs. 40,1%).